sábado, mayo 08, 2004

ÍTACAS



Estamos asistiendo a un desarrollo de la tecnología que por sus dimensiones y capacidad de penetración en nuestra realidad civilizatoria, supone un gran potencial de desarrollo que se incrementa junto a peligros inocultables de utilización perversa. La cuestión no es sólo que la nueva tecnología invada la sociedad, sino que ésta acabe rindiendose a ella en lo que sería plena transmutación de los fines por los medios.
Para todos los ensimismados que están convirtiendo la tecnología en un fin en si misma, en su horizonte de sentido, les dejo estos versos de Cavafis de su poema , Ítaca para que les sirva como faro inolvidable.

"Cuando emprendas tu viaje a Ítaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
[...]
Pide que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas de verano
en que llegues -¡con placer y alegría!-
a puertos antes nunca vistos.
[...]
Ten siempre a Ítaca en tu pensamiento.
Tu llegada allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.

Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguardar a que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Ítaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Ítacas".

La Ítaca que buscaba Ulises era su horizonte de sentido, bajo el cual tuvo que reorientar su vida de vuelta de tantas batallas que, aun con toda su épica, no colmaban el vacío de la existencia; la Ítaca que perseguimos cada uno de nosotros es el sentido que anhelamos y que hemos de recuperar en esta época de internautas, a la vez durisimo tiempo de violencia para los millones de personas que naufragan en el inhóspito océano de la realidad historica. Cualquier Ítaca se desvanece como escandalosa ilusión para cualquier Ulises que no mire para otro lado al pasar por tantas playas inundadas de cadáveres. Nuestra cultura, con todo su, digitalismo, continuará alimentando el sin-sentido más deshumanizante mientras siga impasible ante tantos y tantos náufragos.

Extracto sacado e interpretado de la obra "Internautas y náufragos" de Jose Antonio Pérez Tapias.
EDITORIAL TROTTA